La República Centroafricana es un país que atraviesa una profunda inestabilidad fruto de múltiples problemáticas que atraviesa el país: una guerra civil, una economía estructuralmente debilitada, una sociedad cuyos índices de pobreza y hambruna son alarmantes y cuya democracia se resquebraja frente a grupos armados. Ante este estado de situación, las posibles ansias de cambios y prosperidad se vuelven disímiles ante panoramas que solo arrojan una balanza negativa.
Ante este panorama, el objetivo del presente trabajo es poder analizar una parte de ese gran “mosaico” complejo que constituye la realidad centroafricana. En específico, intentar desandar el concepto de “sharp power”, cuya traducción literal al español es “poder agudo/punzante”, para observar si las prácticas del gobierno ruso en Centroáfrica se pueden encuadrar conceptualmente en el mismo. Temporalmente, el núcleo de referencia serán los sucesos producidos en diciembre del año 2020, cuando se llevaron adelante elecciones en la República Centroafricana mientras se detectaba “comportamiento coordinado no auténtico" en redes sociales ligadas a políticos del Kremlin acusados por interferencia electoral y difusión de información falsa. Luego de ello, se procederá a observar cuales son algunas implicancias e impactos que esto tiene para la construcción de la democracia en el país africano.