El presente libro es el producto de un largo proceso de estudio, investigación y aprendizaje. Comencé a desarrollar mi tesis de maestría en Derechos Humanos con un proyecto que planteaba el estudio sobre la educación en derechos humanos en el nivel inicial; pero no estaba explícita la idea del enfoque de género, tal como se aborda aquí. Este interés surgió durante el trabajo de campo, al realizar observaciones en dos jardines de la ciudad de La Plata. En particular, fui advirtiendo la fuerte presencia de estereotipos de género en los juegos, en el uso del lenguaje y en las clases en general. En este sentido, desde de mi posición de defensora de los derechos humanos y de los derechos de las mujeres, y como feminista, la investigación viró hacia la pregunta por la transversalidad de género en la educación inicial. A partir de las primeras inmersiones en el campo, y gracias al acercamiento a la valiosa bibliografía sobre enfoque y transversalidad de género, decidí modificar la hipótesis de trabajo. Y, si bien el enfoque de derechos es clave en el presente, el enfoque de género tiene mayor centralidad.