Darwin en su expresión de las emociones señala tres categorias fundamentales de modos de expresión; unos responden únicamente a movimientos instintivos; (1) otros, a lo que éI denomina el "principio de la antítesis" (2) Y los ultimos, es decir, todos los que no caben en las categorias anteriores, pueden explicarse según el autor por la acción nerviosa involuntaria, o lo que es lo mismo, por lo que Bain llama "difusión nerviosa". Aun queda una última categoría de movimientos de expresión que no podrían explicarse por las causas expuestas y en ellos se recurre a la exuberancia de vida y la espontaneidad de los movimientos, tales como el pataleo de un niño recien nacido que da Bain como ejemplo.