La psicología moderna, desligada de la metafísica, ha entrado en una nueva faz: la faz experimental. Durante mucho tiempo se creyó con Kant que la psicología no podía llegar á constituir una ciencia, debido á que los fenómenos psíquicos no podían ser medidos con precisión matemática. Esta doctrina prevaleció en el campo de la filosofía, sostenida por los metafísicos con fervor hasta que Herbart, con la luz de su talento, logró modificar el concepto de Kant. Sostenía Herbart que los fenómenos psíquicos, produciéndose en el tiempo y aun en el espacio, eran susceptibles de ser medidos. Surge entonces la psicología experimental, desligada de toda tendencia materialista, espiritualista y monista, que no se propone ya buscar una solución particular á los grandes problemas de la vida y del alma, sino que trata de desentrañar de una manera exacta y precisa, con el apoyo de la psicología nerviosa, los múltiples fenómenos de la psiquis, pasando así, á ocupar el puesto que le estaba asignado entre las ciencias naturales.