Se ha realizado un estudio energético de aquellos eventos que fueron observados entre el 11 y 12 de noviembre de 1980 y que se produjeron en una misma zona de la región activa NOAA 2779. Estos son los más energéticos y de larga duración de las fulguraciones de esta región. Los parámetros físicos de las diferenciadas estructuras magnéticas fueron deducidos de las observaciones de rayos X del HXIS a bordo del SMM. Se concluye que para estas fulguraciones homólogas la energía depositada en la cromosfera por un haz de electrones, con parámetros razonables compatibles con las observaciones, es del mismo orden que la energía transportada por el plasma que sube por evaporación y que el contenido de energía térmica del loop coronal descontadas las pérdidas por conducción.