Las enfermedades micóticas profundas abarcan dos grupos distintos de trastornos: las micosis subcutáneas y las micosis sistémicas.
Las micosis subcutáneas o micosis de implantación, son infecciones causadas por hongos que se han introducido directamente en la dermis o en el tejido celular subcutáneo a través de una herida o pinchazo. Dentro de ellas las más comunes son la esporotricosis, el micetoma y la cromoblastomicosis.
La esporotricosis, es una micosis subcutánea granulomatosa, subaguda o crónica, producida por el complejo dimórfico Sporothrix schenckii, el cual se encuentra ampliamente distribuido en la naturaleza. De gran variabilidad clínica, se limita por lo general a la piel y al tejido celular subcutáneo, aunque ocasionalmente se produce su diseminación dando lugar a formas sistémicas.
Es considerada una enfermedad ocupacional, y en algunos casos una verdadera zoonosis; enfermedad cosmopolita, probablemente sea la micosis con manifestaciones dermatológicas más frecuente en todo el mundo. En la presente revisión se comentan los aspectos más importantes referentes a esta micosis, teniendo en cuenta los hallazgos científicos publicados en la literatura de los últimos años.