Investigar para comprender y transformar procesos y prácticas situadas en el ámbito educativo: experiencias y desafíos desde una investigación en colabor

Abstract

Plantear una intervención como equipo de investigación en colabor demanda situarnos en un contexto y con unos objetivos y preguntas específicos. Asumimos así que nuestra identidad como agentes en un contexto sociocultural desafiante -el educativo, en escuelas de enseñanza secundaria de la Provincia de Entre Ríos y también en el nivel superior- constituye el punto inicial desde el que decidimos abordar realidades que no observamos desde afuera sino como participantes activos: nuestras propias prácticas. En el recorrido que hemos transitado nos han acompañado dos certezas que enmarcan nuestro trabajo. En primer lugar, la investigación en el campo de la enseñanza no siempre ha regresado a las escuelas, por lo que algunos equipos han decidido resguardar de las observaciones ciertos espacios y prácticas. Frente a esto, formas colaborativas de investigación nos permiten superar esa dificultad y a la vez adquirir conocimientos no solo vinculados a los resultados de un proyecto sino a su mismo proceso. Para esto último, construir horizontalidad en el equipo y en el modo en que interactuamos con nuestros contextos de práctica se constituye en una meta que asumimos también colaborativamente. En este contexto, la autoetnografía representa para nosotros una oportunidad dado que nos permite poner en discurso y objetivar modos en que se tensionan el curriculum prescripto, los posicionamientos docentes en torno a la enseñanza de la lengua y la literatura en el nivel secundario -foco de nuestras reflexiones- y sus vínculos con el curriculum oculto institucional. Estos aspectos que aparecen muchas veces invisibilizados en el devenir de la cotidianeidad constituyen núcleos desde los cuales es posible pensar la disciplina y las particularidades de los sistemas didácticos que se entretejen en cada comunidad educativa. En esta comunicación, nos posicionamos desde la pregunta por el modo en que nuestro trabajo de investigación modifica nuestras prácticas de docencia, no para proponer una respuesta sino para reflexionar sobre cómo dicho cuestionamiento atraviesa la labor del grupo y multiplica los desafíos propios de la investigación en colabor que llevamos adelante.