La cooperativa es una empresa formada por un grupo de personas, motivadas por sus propios intereses y necesidades, sujeta a unas normas jurídicas concretas y a unas normas específicas, los principios y valores cooperativos. Su actividad está sujeta a una multitud de fuerzas de un entorno que la condicionan con distinta intensidad y resultado. Un entorno que se vuelve hostil y turbulento por su complejidad (sobre la empresa influyen cada vez más factores), su incertidumbre (la dificultad de predecir su comportamiento es cada vez mayor), y su dinamismo (el grado de variabilidad de los factores estratégicos es cada vez más intenso) (Sanchis Palacio, 1995: 24).
Del conjunto de factores presentes deriva entonces la problemática del cooperativismo, que adquiere matices propios según cada región o país donde se desarrolla, de cada rubro o sector que abarque, de cada legislación que lo regule y de las políticas públicas que por acción u omisión se apliquen en torno al sector. Es precisamente esa complejidad y heterogeneidad del cooperativismo la que pretende reflejar el presente dossier integrado por seis artículos.