Este artículo se sustenta en entrevistas realizadas a los integrantes de los espacios culturales Escala Vagón y BÚM, seleccionados dentro de una amplia lista de casos. En tal sentido, se establecen relaciones entre las miradas de ambos espacios, se destaca la disparidad en sus modos de gestión, se evalúa la articulación con el circuito artístico, las nuevas formas de exhibición y el perfil de cada uno. Se indaga sobre sus propósitos, las nuevas estrategias que los reafirman como lugares de encuentro, de socialización, de comercialización y de nuevas experiencias.