De las investigaciones hechas por uno de nosotros sobre algunas ténias del hombre, y aquellas más recientes de Mingazzini sobre algunos helmintos intestinales, resulta la confirmación experimental de la antigua opinión que la acción nociva producida por las ténias es debida á una sustancia tóxica elaborada por ellas, de preferencia á la irritación mecánica y á las alteraciones anatómicas provocadas por estos parásitos sobre la mucosa intestinal del huésped. Partiendo de ahí, nosotros hemos creido interesante repetir estas experiencias con algunas modificaciones y con el control de las lesiones histológicas.