En este escrito, se tomará la actual alianza entre los Estados Unidos y la República de Corea, para abrir paso a un análisis acerca del impacto del ascenso de China sobre esta relación.
Se tomará como elemento de análisis la lógica de vinculación propia del siglo XXI. Bajo un contexto globalizado, y de diversificación en los canales de interacción y áreas de relacionamiento, la teoría de la interdependencia nos permite observar la complejidad en el entramado de relaciones, y a su vez la brecha de lazos que estas nuevas condiciones permiten llevar a cabo.
Se utilizarán las herramientas analíticas de ésta teoría para alcanzar una mejor comprensión de las esferas de interacción que dieron inicio a la tradicional alianza aquí expuesta, y a su vez, aquellas que han sido desplazadas tras el auge chino. Para entonces, definir cuáles se han vuelto factores de dependencia para Seúl en relación con Beijing, y si es que está dinámica ha erosionado los cimientos de la relación Washington-Seúl.