El cultivo de las plantas textiles, cualesquiera que ellas sean, constituye siempre un tema interesante para nuestro país, que depende completamente del exterior, para el abastecimlonio de las fibras y de los tejidos que su población, la agricultura, el comercio y la industria necesitan y empujan por valor de muchos millones de pesos oro. Y el interés es todavía mayor cuando se trata de plantas ya aclimatadas, ó que pueden fácilmente adaptarse, como el henequén, maguey, pita ó agave, cuyos filamentos hallan importantes aplicaciones, como la de la fabricación del hilo para atar el trigo y otros cereales que se cultivan sobre una superficie tan vasta y que ha de aumentar cada año en fuerte proporción. De ahí el origen de esas notas que condensan algunas faces de las cuestiones relativas al cultivo del henequén y á la extracción de las fibras que produce esta plañir, con el objeto de proyectar mayor luz sobre su adaptación á nuestro medio y á nuestras condicíones agrícolas é industriales, favoreciendo su introducción en nuestras exploraciones.