El cáncer de mama es la segunda causa de muerte en EE.UU. A pesar de las modernas terapéuticas, de la tercera a la mitad de las pacientes que desarrollan la enfermedad, mueren por la misma. La efectividad limitada de los tratamientos actuales, ha focalizado los esfuerzos en la prevención, para lo cual es importante el conocimiento de las anormalidades biológicas que llevan a su desarrollo y progresión. Desde el punto de vista de la evolución, el cáncer de mama invasivo se desarrolla gradualmente de lesiones precursoras microscópicamente. Estas lesiones son relativamente pequeñas, sólo una pequeña proporción de las mismas progresa a cáncer invasivo. Muchas anormalidades biológicas son silentes. Identificar las anormalidades biológicas en lesiones premalignas permite conocer el riesgo de progresión a invasivo y prevenir antes que ocurra esta progresión.