Los pueblos indígenas, desde el siglo XXI con mayor énfasis, han buscado ser sujetos de su propio desarrollo, revalorización de su identidad, su cultura y raíces. Además, se pueden ver debates internacionales de pueblos indígenas que también entran en el marco de la autodeterminación de los pueblos, multiculturalidad, respeto a los derechos humanos, ambientales, entre otros (Pava, 2016). La Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas (DNUDPI) es uno de los instrumentos internacionales más importantes para la llamada diplomacia indígena, ya que le otorga mayor atención y énfasis a la participación indígena tanto dentro de los Estados Nacionales como fuera de los ámbitos estatales (Torres, 2013). La participación de los indígenas dentro de la diplomacia mundial es efectiva en defensa de sus derechos e indica que la comunidad internacional reconoce a los pueblos indígenas como un nuevo actor geopolítico (Atamaint, 2014).