La Universidad es generadora de conocimientos. Como institución formadora de recursos humanos está obligada a replantearse los hábitos de enseñanza con los requerimientos sociales, científicos y tecnológicos y permitir la actualización y capacitación de los alumnos para elevar su competencia y desempeño profesional. Para Ponz Piedrahita ha de ser considerada como una institución dedicada a la enseñanza en el más alto nivel, al cultivo del saber universal y a su acrecentamiento mediante la investigación en las diversas ciencias y a la educación superior e integral de los estudiantes. En un mundo globalizado, en el que se viene apuntando hacia la calidad total, y en el cual el mercado laboral y profesional se vuelve cada vez más selectivo y competitivo, la educación superior surge ante los adolescentes como un medio fundamental para alcanzar sus metas de realización personal.