La Educación para la Salud debe estar presente en todas las esferas de la sociedad: en la familia, en las escuelas, en las universidades, en los centros de trabajo y cada uno de nosotros debemos ser capaces de formar verdaderos “agentes multiplicadores de salud” para transmitir hábitos de vida saludables. En la Universidad, durante la formación de grado se busca promover, formar y capacitar a los futuros profesionales con una enseñanza basada en una filosofía preventiva en lo que a odontología respecta. El conocimiento que el estudiante de odontología adquiere sobre medidas preventivas para preservar la salud bucal, debería provocar un impacto significativo sobre su persona y de esta manera en el medio en el que se encuentra inmerso.