En la actualidad, el grupo terrorista Boko Haram sigue siendo la principal amenaza a la seguridad de los países que limitan en la Cuenca del Chad. Los avances y retrocesos logrados en los continuos enfrentamientos entre las fuerzas conjuntas de los países involucrados y la organización extremista dan lugar a cuestionar si el esfuerzo regional en seguridad es lo suficientemente fuerte y si las condiciones sociopolíticas ayudan o perjudican al establecimiento de Boko Haram.