La incursión de la robótica en los más variados ámbitos de la vida social, exige reflexionar sobre la necesidad de adaptar la legislación a los desafíos que platean las nuevas tecnologías. Al respecto es crucial verificar quienes son los sujetos responsables por los daños que puedan derivarse de ella. A partir de un análisis sistemático y comparativo, resulta conveniente no encasillar al operador jurídico en un único supuesto de responsabilidad sino dejarlo abierto a varios de ellos.