El punto de partida de todo proceso de planificación sanitaria es la salud. Se desarrolla en los campos: a) de la prevención y la asistencia y b) sobre los servicios de salud.
Según la definición de la O.M.S. “La salud es un estado completo de bienestar físico, mental y social, y no consiste sólo en la ausencia de enfermedad.” Según Goldberg hay un enfoque perceptual (percepción de bienestar); un enfoque funcional (estado de capacidad óptima de un individuo para cumplir eficazmente las funciones y tareas para las que fue preparado) y un enfoque de adaptación acertada y permanente de un organismo a su entorno.
Bonnevie sintetiza que: “la salud resulta de una capacidad comportamental que comprende los componentes biológicos y sociales para cumplir las funciones fundamentales que sólo pueden serlo por un proceso de adaptación”.
La esperanza de vida en buena salud predice al individuo el promedio de tiempo que puede esperar vivir sin limitación de sus actividades (Bonnevie,1973).
Una definición social de la salud es necesaria para poder instaurar programas sanitarios. La salud es multidimensional: en lo social, cultural y económico y es multifactorial: factores: biológico, del entorno, de los estilos de vida y del sistema sanitario (Rochón).