Entre las numerosas tentativas de las provincias argentinas en el período histórico que media de 1838 a 1852 para librarse de la tutela de Rosas, se destaca ]a campaña libertadora del general Lavalle, la cual, si bien no fué coronada con el éxito - como lo sería en 1852 la cruzada del general Urquiza, - fué, sin embargo, la que puso en más serio peligro la estabilidad del dictador argentino.
Esta empresa del general Lavalle, a la que por orden cronológico corresponde la denominación de «campaña del segundo ejército libertador» (pues el primer ejército de esta categoría cayó vencido con Berón de Astrada en Pago Largo), reviste un acentuado interés histórico; es evidente que su feliz resultado hubiese economizado al país el trágico período de doce años que siguió hasta Caseros.
(Párrafo extraído del texto a modo de resumen)