Consumo, ansiedad y pánico. Rostros sonrientes en afi ches publicitarios y carteles luminosos. La alarma de un local de indumentaria sonando sin parar en la mitad de la noche: situaciones que inundan el espectro visible y sonoro de la ciudad, formando un panorama dotado de un sinfín de capas de sentidos que se cuelan constantemente por nuestros ojos y oídos cada vez que salimos a la calle. El fluir de imágenes y sonidos en el espacio urbano y la relación que se establece entre éstos y nuestra subjetividad, son los ejes sobre los cuales se indagará; siendo este cortometraje el recipiente dentro del cual se intentará articular, con una fuerte impronta personal y experimental, las potencialidades y el devenir de la puesta en tensión de dichos elementos.