Los últimos años ele vida cultural, política y material del país, han demostrado la necesidad de resolver con urgencia el grave problema de la elevación del nivel medio de las grandes masas de nuestra población rural y urbana. Las conquistas democráticas, las mejoras de todo tipo y la elevación moral inpuestas por iniciativa y obra de minorías cultas no son vividas todavía con la intensidad y sinceridad que tienen las convicciones apoyadas en la comprensión de los hechos o de sus fines.