La rotura prematura de membranas es la rotura de las membranas coriamnióticas después de las 21,6 semanas y hasta dos horas antes del inicio del trabajo de parto. Ocurre en el 3 al 18 % de los embarazos, la quinta parte antes de las 37 semanas, contribuyendo al 30 % de los nacimientos prematuros. El diagnóstico es mayormente clínico y para su manejo y tratamiento se deben considerar la edad gestacional y presencia de corioamnionitis. La antibioticoterapia, maduración pulmonar y la neuroprotección fetal han reducido la morbimortalidad neonatal, mejorando el pronóstico en la evolución posnatal.