Desde la primera cita de la invasión del mejillón dorado en las costas de América del Sur, en el Río de la Plata, Argentina (Pastorino y otros, 1993), todavía se enfrenta al macrofouling (macro-incrustaciones) de agua dulce como un novedoso problema económico/ambiental para los sistemas hídricos dulciacuícolas de América del Sur. Este lamentable hecho tiene base en las políticas científicas de los países miembros del Mercosur, las que parecen estar subordinadas únicamente a las inestables políticas socio-económicas de cada uno de ellos. Sobre esta base es posible esquematizar la forma en que se debería encarar éste problema y diferenciar dos grandes módulos: Métodos de Prevención, Control y Difusión.