El proyecto se enfoca en contribuir a la relación que se da entre la arquitectura y la pedagogía, dos disciplinas que no pueden pensarse de forma separada si lo que se busca es construir educación de calidad.
El proyecto Centro Integral de Educación surge de la reflexión de cómo los espacios impactan en las emociones de las personas a través de la percepción sensorial y del entendimiento en el desarrollo de las mismas, la etapa más importante es la primera edad.
En donde se adquieren características socio emocionales que perduran y siguen a la persona en el tiempo. De esta manera se decide trabajar con un equipamiento que atienda al desarrollo de niñas y niños, generando ámbitos y atmósferas que repiensen cómo deben ser los espacios de la infancia.