La vida y la obra de Juan María Gutiérrez, están indisolublemente unidas a la historia de la organización nacional y a la historia de la cultura americana.
Hijo de un hogar cuyo ambiente fué propicio al desenvolvimiento de sus inclinaciones espirituales, creció bajo la égida moral de don José Matías Gutiérrez y doña María de la Concepción Granados, cuyas vidas se ligaron con fervoroso amor a los sucesos de la patria.
Aunque falleció el padre y la quiebra de una casa comercial sumió a la familia en la miseria, el joven Juan María continuó los estudios superiores. En el Departamento Topográfico donde trabajó por recomendación de sus profesores Don Avelino Díaz y Don Vicente López, debió ascensos a la simpatía que le profesó el Coronel Alvarez de Arenales.
En los terribles años de 1838 a 1840, la patria vivió sobresaltada por gran anarquía. Sombras, sangre y angustias conmovieron los ámbitos del país, el ánimo de cuyos hijos agitaba la Comisión Argentina de Montevideo.