En El revés del rostro. Figuras de la exterioridad en la cultura argentina, Nora Domínguez vuelve a un tema extensamente estudiado por la filosofía y que en los últimos años parece haber sido eclipsado en los estudios críticos por la preeminencia del cuerpo: el rostro y las maquinarias de rostridad. De este modo, Domínguez produce un complejo dispositivo de lectura de la cultura, las artes y la sociedad articulando su mirada ensayística con conceptualizaciones y reflexiones de Deleuze y Guattari, Agamben, Le Breton, Didi-Huberman, Altuna y Aumont, entre otros.