Por "intuicionismo lógico" se entiende una cierta tendencia filosófica que, si bien reivindica una forma de intuición intelectual como método de conocimiento, no debe ser incluida como subcorriente de ninguna de las escuelas gnoseológicas tradicionales, a las que se designa como "intuicionistas" (scheleriana, bergsoniana, husserliana, etc.). El carácter heterodoxo de este neointuicionismo proviene de varios rasgos distintivos que ningún estudioso de la filosofía tradicional, atribuiría a la "intuición" en sentido clásico (sea racional, mística, emotiva, etc) ya que siempre fueron considerados como totalmente incompatibles con ella. En efecto, este intuicionismo se interesa particularmente por la lógica y la matemática y no en sentido despectivo ni destructivo, sino todo lo contrarlo. Además, emplea sistemáticamente el análisis lógico, la estructuración según axiomas, el método de los lenguajes formalizados, y otros artificios filosóficamente neutrales, que lo colocan en el mismo plano que a las demás escuelas filosóficas a las cuales se atribuye sin ningún fundamento el monopolio de la lógica matemática (escuelas analitistas, empiristas, neopositivistas, formalistas, etc.).