El trabajo busca desarrollar superficies biocompatibles favoreciendo la regeneración ósea a partir de la disminución de los tiempos de cicatrización, y en consecuencia los tiempos de osteointegración del implante. Con las técnicas actuales, los tiempos entre la primera y segunda fase de cirugía son de cuatro a seis meses. El estudio de dichas superficies es evaluado mediante ensayos in-vitro con células madre mesenquimales, particularmente el enfoque está dado hacia la evaluación de la interacción de las células con la superficie en estudio. Se estudiarán las características físicas y químicas de las superficies y como éstas impactan en su biocompatibilidad. Para realizar la caracterización de las superficies y de los cultivos celulares, se utilizarán las técnicas de Microscopía Óptica, Microscopía Electrónica de Barrido y Espectroscopía Dispersiva en Energías.