Influenza es una enfermedad respiratoria aguda, altamente transmisible, de distribución mundial y de ocurrencia estacional, causada por alguno de los 3 tipos de virus de la influenza que se conocen: A, B o C. Se caracteriza por la súbita aparición de signos y síntomas como fiebre (38-40ºC), mialgias, cefalea, escalofríos, decaimiento, tos no productiva, faringitis y rinitis. Una de las complicaciones frecuentes durante la convalecencia del cuadro viral es la neumonía bacteriana secundaria, sobre todo en pacientes con enfermedades subyacentes como diabetes, tumores, enfermedades cardíacas o pulmonares crónicas. Los principales agentes implicados en la neumonía bacteriana secundaria son: Streptococcus pneumoniae, Staphylococcus aureus y Haemophilus influenzae. La pandemia actual de influenza, iniciada en EE.UU y México durante el mes de marzo del año 2009, cuyo primer caso reportado en Argentina fue a mediados del mes de abril, está relacionada a un nuevo virus identificado como influenza tipo A H1N1. En la infección por esta cepa se observó un aumento en la tasa de ataque de las formas graves de influenza.