La violencia laboral aparece como una problemática contemporánea, no porque resulte novedosa, sino porque fue conceptualizada y visibilizada en los últimos años. Cabe destacar que el presente trabajo es anterior a la aprobación del Convenio 190 de la OIT. Asimismo, es una violencia que se dirige tanto a hombres como a mujeres, sin embargo los espacios de trabajo no son inocuos a las desigualdades de género que existen a nivel social. Por ello, es que afectan en mayor medida a las mujeres, y por ello es que, este trabajo se dirige a indagar sobre dichas violencias hacia las mujeres en el espacio laboral.
Avanzando en circunscribir el objeto de estudio del presente trabajo, diremos que: En primer término, se busca analizar las acciones constitutivas de las violencias mencionadas (acoso sexual y moral hacia las mujeres en el lugar de trabajo), indagar características de las víctimas, así como de los agresores y aspectos probatorios de dichos ilícitos. Ambas formas de violencia serán analizadas como constitutivas de injuria laboral determinantes del despido, ya sea indirecto de la persona que lo sufre o directo de la persona acosadora.
Por otra parte, se busca evidenciar que sin tener en cuenta los estándares normativos y jurisprudenciales en violencia de género, estas violencias corren riesgo de quedar impunes, ya que difícilmente puedan probarse por la naturaleza de los hechos, generalmente ocurren en ámbitos de privacidad, sin presencia de testigos, siendo el testimonio de la víctima la prueba central. El dato no es menor, en tanto que aplicar dichos estándares garantiza el acceso a la justicia de las víctimas o, caso contrario, su denegación.