Cúmpleme elevar, al señor presidente, la memoria del instituto que tengo el honor de dirigir, correspondiente a los años 1922 y 1923. Con relación a la memoria anterior ésta aparece de mayor extensión, debido a que en ella, dejó constancia de las tareas realizadas en los dos últimos años, como de los nuevos puntos de vista que tendré presentes para dirigir el desenvolvimiento del Museo de La Plata. De lo que dejó establecido en este documento puede esperarse, a mi juicio, un período de franco engrandecimiento, lo que ha de contribuir a la más alta importancia de la Universidad que, con tanta dedicación, V. S. preside.