El viernes 30 de junio, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas estableció el fin del mandato en la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de las Naciones Unidas en Mali (MINUSMA), tras 10 años de un funcionamiento que abre dudas sobre la efectividad del sistema de mantenimiento de la paz y que invita a pensar si estas operaciones son la mejor herramienta para hacer frente a los desafíos de seguridad que enfrenta el Sahel. Aquí se vierten algunas reflexiones sobre la situación general de esta región y los efectos que podría tener este cierre en el sistema de operaciones de paz.