El intestino es uno de los órganos más sensibles a la injuria por isquemia-reperfusión (IRI), fenómeno presente en diversas situaciones clínicas como hernias estranguladas, vólvulo, enterocolitis necrotizante y trasplante intestinal. Pese a que se sabe que la duración de la isquemia es determinante en el daño tisular luego de un evento de isquemia-reperfusión, no está claramente dilucidado cual es el tiempo de isquemia intestinal que provoca una lesión letal para el órgano en cuestión y para la supervivencia pos reperfusión.