La fosa pterigomaxilar constituye una de las cavidades comunes a la cara y el cráneo. Tiene forma de una pirámide cuadrangular, de base superior y vértice inferior. Se encuentra ubicada entre la apófisis pterigoides del hueso esfenoides por detrás, la cara posterior de la tuberosidad del maxilar superior hacia adelante, y la porción horizontal del ala mayor del esfenoides y parte de la escama del hueso temporal hacia arriba. Su trasfondo, solo descrito por algunos autores, está limitado hacia adentro por el hueso palatino, en cuyo borde superior presenta el orificio (esfenopalatino) que comunica con las fosas nasales. La complejidad de sus paredes y las diversas comunicaciones con espacios vecinos hace que los alumnos presenten dificultades en su estudio, y plantean al docente el desafío de generar nuevas herramientas pedagógicas.