El método del Análisis del Ciclo de Vida es quizás el más difundido para llevar a cabo evaluaciones de impacto ambiental. El método está bien codificado y estructurado para el análisis de sistemas industriales, fundamentalmente a través de las normas ISO 14040, y de los lineamientos dados en SETAC 1993. Sin embargo, la aplicación del ACV puede ser extendida a otros sistemas, como los del sector edilicio. En este ámbito el ACV puede servir para definir la elección de los materiales utilizados en la edilicia con menor impacto ambiental y a optimizar el uso de recursos adoptando nuevas soluciones proyectuales que optimicen la relación entre la envolvente y el ambiente externo. Se presentan algunas consideraciones particulares a tener en cuenta para la aplicación de esta metodología al estudio de sistemas del sector edilicio.