En la pampa húmeda existe una superficie creciente de plantaciones forestales comerciales, correspondientes tanto a emprendimientos foresto-industriales como a establecimientos agropecuarios de distinto tamaño que complementan con la silvicultura otras actividades tradicionales. Los álamos (Populus spp.) encuentran en la región sitios de buena aptitud e industrias que consumen este tipo de madera, siendo junto con los eucaliptos (Eucalyptus spp.) las especies más importantes (SAGPyA, 2001).
En las plantaciones de álamo, las prácticas de fertilización tienen escasa difusión; el buen crecimiento promedio de las plantaciones, sumado a la creencia de que los cultivos forestales tienen bajos requerimientos de nutrientes, han llevado a considerar el estado nutricional de estos bosques como un aspecto secundario.
Es común sin embargo, que las plantaciones sean establecidas en los lotes de menor calidad para la agricultura y la ganadería, o en sectores que han sido utilizados en dichas actividades con escasos o nulos aportes de fertilizantes a lo largo de su historia de uso. A lo anterior debe agregarse que las forestaciones llevan completados en algunos sitios entre 2 y 4 ciclos de corta sin realizar tratamientos de fertilización. Dado que los álamos son exigentes en cuanto a la provisión de nutrientes (Heilman et al., 1996), es probable que un número considerable de plantaciones presenten deficiencias y/o desbalances nutricionales de variada intensidad.
En el año 1998, las Cátedras de Silvicultura y Edafología de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la UNLP comenzaron a experimentar con fertilizaciones de arranque en álamo, buscando complementar esta práctica con herbicidas en sistemas integrados de control de malezas (Achinelli et al., 2001). A partir de esta experiencia se dio inicio a una línea de investigación específica, en donde se están evaluando las respuestas de dos clones a la aplicación de diferentes dosis y combinaciones de fertilizantes nitrogenados, fosforados y potásicos. Sobre los mismos ensayos y en forma paralela se están ajustando métodos de diagnóstico y monitoreo del estado nutricional (Baridon et al., 2002; Achinelli et al., 2003).
En este trabajo se exponen en forma sintética los avances alcanzados hasta el presente en las áreas mencionadas. La investigación se lleva a cabo en un establecimiento forestal ubicado en el Partido de Alberti, Provincia de Buenos Aires (34° 50’ Lat. Sur; 60° 30’ Long. Oeste; 55 msnm; 930 mm de precipitación media anual).