No puede negarse que hablar de Derecho Penal, en cualquiera de sus acepciones, es hablar de libertad y en ese sentido, Francesco Carrara, tenia razón al afirmar: “libertad es lo mismo que derecho, ya que la idea de éste se compendia precisamente en aquélla, pues nadie puede considerarse y sentirse libre si no puede ejercer al mismo tiempo alguno de los derechos especiales que le competen, sea que use de sus facultades internas, sea que use de las externas.”
Sin embargo, la libertad tiene claras manifestaciones las que son tuteladas por el derecho, como sistema normativo, esas manifestaciones se hallan resumidas en lo que se conoce como “el obrar de otra manera”, es decir, la posibilidad real de actuar de manera propia al servicio de los intereses de quien actúa, en búsqueda de su bien o, lo que es lo mismo, el obrar de manera distinta. –libertad de obrar-.