Este Congreso, debe arribar a conclusiones realistas, y no meras afirmaciones demagógicas, tendientes a cubrir las responsabilidades políticas, académicas, e institucionales que nos han llevado a la situación actual en la Provincia de Buenos Aires.
Debe tender a solucionar los gravísimos problemas que vive el habitante de la Provincia, la “víctima” en muchos casos, habida cuenta de la estadística oficial y extraoficial que se percibe, luego de más de cinco años de vigencia del nuevo C.P.P., que se presentaba como “la panacea” que daría respuesta a los gravísimos problemas que Buenos Aires, padecía en el año 1997.
Mi ponencia, no será un discurso académico, alejado de la triste realidad del proceso penal y la falta de respuestas a la víctima, sino la clara exposición de un abogado, que, al margen de su posicionamiento político, advirtió ya en 1997, que este sistema era un verdadero “salto al vacío”.