En el Delta del Paraná los sitios destinados a la forestación con Salicáceas se caracterizan por la presencia de comunidades vegetales de elevada diversidad, compuestas por especies nativas y exóticas que por su densidad e historia de vida muchas veces se comportan como malezas.
En este trabajo se determinaron los efectos netos de las interacciones entre distintos clones de álamo (Populus spp.) y sauce (Salix spp.) con las comunidades vegetales de albardones y esteros, y se evaluaron las respuestas del cultivo forestal ante el control mecánico tradicional y diferentes sistemas químico-mecánicos de control de malezas.
Se realizaron tres ensayos en campo, en establecimientos forestales ubicados en el Predelta y el bajo Delta del Paraná; se utilizaron los clones P. deltoides ‘Mississippi Slim’ (“Stoneville 67”), P.deltoides ‘A 208/68’ (ensayos en albardones en Islas de Ibicuy, Entre Ríos y Río Carabelas Grande, Buenos Aires), y Salix babylonica var. sacramenta (“sauce americano”; ensayo en estero, Ibicuy). Los tratamientos se realizaron durante los dos primeros años post-plantación y fueron: testigo sin control de malezas (T-), testigo con control completo de malezas, control mecánico con rolo en entrefilas y macheteadas o desmalezado con motoguadaña en las bandas de plantación, y controles químico-mecánicos con rolo en entrefilas y aplicación de herbicidas en las bandas.
Las coberturas de malezas y las especies dominantes fueron diferentes entre los sitios de estero, albardón “fuera de dique” (Ibicuy) y albardón “dentro de dique” (Carabelas), pero en todos los casos predominaron los efectos de interferencia de las malezas hacia el cultivo por sobre los efectos de facilitación. Así, en los clones de álamo las malezas produjeron pérdidas de crecimiento en altura del 43 al 47% al segundo año y en el albardón de Islas de Ibicuy una merma en la supervivencia de estacas del 84%; las pérdidas de crecimiento en el albardón de Río Carabelas Grande continuaron siendo significativas cumplido el quinto año de edad, con mermas del 20% en altura total y 33% en DAP. El “sauce americano” en tanto, tuvo pérdidas al segundo año del 34% en altura y del 85% en el índice de volumen, sin que las malezas afectaran la supervivencia.
El control mecánico tuvo bajas eficiencias, ya que las respuestas logradas en el cultivo no tuvieron mejoras significativas respecto de T-. Los sistemas químico-mecánicos resultaron en general más efectivos que el control mecánico, aunque con deficiencias para el control de malezas arbóreas, arbustivas y enredaderas.