Las ciudades de escala intermedia en países con territorios extensos, constituyen oportunidades para gestionar la densidad de la población, la articulación de la ciudad con su medio rural productivo, y resolver los problemas propios que generan las propias urbes antes de llegar a la escala de los conflictos de las grandes ciudades centrales. Por otro lado representan polos de atracción regionales, y una forma de distribuir la población de un mismo país, en varias ciudades de escalas similares, que contrarreste la tendencia a la concentración en una o pocas mega aglomeraciones urbanas.
Los proyectos urbanos son una herramienta importante para intervenir en la ciudad, tanto para contrarrestar tendencias negativas, como para potenciar las posibilidades de sectores postergados de las urbes. Permiten abordar en simultáneo problemas de orden socioeconómico, de desarrollo sostenible, ecológico-productivos, riesgo hídrico, etc. a partir de propuestas específicas que conducen la multiplicidad de acciones que desde las diferentes disciplinas deben abordar estas cuestiones.
Se toma el sector de intervención que corresponde a un tramo del recorrido final de la cuenca del Arroyo Maldonado, que atraviesa la conurbación S-E de la ciudad de La Plata. Se trata de un sector relativamente postergado en su desarrollo, y ambientalmente vulnerable. Fue uno de los lugares más afectados por la última inundación. Se busca revitalizar el sector a partir de un proyecto que integra residencia y producción, articulados por un sistema de espacios públicos y con un polo de educación-investigación, dependiente de la Universidad y ligado a la producción frutihortícola urbana.