Con esta ponencia buscamos recuperar el proceso transitado como trabajadoras sociales y docentes en la cátedra Teoría Social, de la Licenciatura en Trabajo Social, de la UNLP, en relación a la construcción del espacio disciplinar y de producción de conocimiento del Trabajo Social en este encuadre pedagógico.
En ese sentido, reflexionar en relación a cómo desde las prácticas de enseñanza que llevamos adelante hemos trabajado para la visibilización de nuestra disciplina, nos permite también, historizar respecto al lugar y al posicionamiento otorgado/asumido para pensar y construir los procesos formativos que desarrollamos.
Nos parece importante pensar aquí, que la modernidad ha asignado al Trabajo Social desde sus orígenes, miradas vinculadas a las prácticas de asistencia y a su dimensión instrumental, lejos de la posibilidad de construir saberes propios que aporten y potencien al campo de la teoría social. Desde este sesgo subalternizado y feminizado que ha signado por mucho tiempo a nuestra profesión, nos posicionamos para reconstruir este espacio, ponerlo en diálogo con las “más importantes tradiciones” de la Teoría Social moderna pero también, con las corrientes y construcciones teóricas que ponen en cuestión al canon sociológico establecido.
En ese sentido, la elaboración tiene como horizonte aportar desde el habitar nuestros espacios socio-laborales e identificar los emergentes históricos y contemporáneos que han contribuido a este proceso. Proceso que ha sido, tanto subjetivo como colectivo, y que lejos de ser lineal, nos desafía a un ejercicio de problematización y construcción constante.