Polémica de los surrealistas y H. Bustos Domecq

Abstract

En la literatura argentina del siglo XX, el surrealismo estuvo representado por Aldo Pellegrini y sus grupos. Su primera revista <i>QUÉ</i> apareció en 1928 y 1930. Posteriormente, en la década del 50, publicaron: <i>A Partir de Cero</i>, <i>Letra y Línea</i> y <i>Boa</i>. De ellas, <i>Letra y Línea, Revista de cultura contemporánea. Artes plásticas. Teatro. Cine. Música. Crítica</i>, n° 3 originó un entredicho entre Borges y Bioy Casares, bajo el seudónimo de H. Bustos Domecq y Pellegrini y Svanascini, director y redactor de la revista mencionada. Basados en ese ejemplar, ellos publicaron en el n° 17, de <i>Buenos Aires Literaria</i>, el cuento-ensayo,"De aporte positivo", en el que la criticaron, en especial, un poema de Pellegrini y las reflexiones sobre la poesía de Svanascini. La respuesta apareció en n° 4 de <i>Letra y Línea</i>, sin firma, dirigida a ellos, fijando la posición de la revista: "Borges y Bioy Casares, paladines de la literatura gelatinosa". Pero no terminó allí, continuó en el n° 3 de <i>A Partir de Cero</i>, en "Comentario a tres frases de autores célebres" de Pellegrini, que criticó una frase de Borges, tomada al azar. Los textos citados manifiestan la posición literaria de ellos en ese momento.