El software, herramienta imprescindible en las más variadas gestiones de la actualidad, también puede ser sostenible, si se tiene en cuenta que un producto sostenible es aquel que aporta beneficios ambientales, sociales y económicos, resguardando la salud pública, el bienestar y el medio ambiente en todo su ciclo de vida.
En la línea de investigación se ha definido un modelo de calidad del software, basado en la Norma ISO 25000, que incluye a la sostenibilidad como característica transversal.
Además, se ha definido un conjunto de métricas e indicadores asociados al modelo de calidad y en particular a la sostenibilidad.
Como continuación de la investigación se está trabajando en la implementación de un algoritmo que permita determinar el grado o nivel de sostenibilidad de un software y su impacto para la sociedad.