En español
El trabajo se propone analizar el impacto del género de las personas investigadoras en los patrones de citación, y en la probabilidad de focalizarse en temáticas de género en investigadoras/es de sociología y ciencia política del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), la institución científica más importante de Argentina. El corpus son los tres trabajos más citados de 253 científicos y científicas de ambas disciplinas al que se aplicaron técnicas de análisis cuantitativo. Nuestros datos comprueban las hipótesis basadas en trabajos de los países del Norte Global y verificamos que las investigadoras citan más mujeres que los investigadores que estudian la temática de género, aunque esto va atenuándose en las generaciones más nuevas. En cuanto a las dos disciplinas, las brechas son menores en sociología que en ciencia política, en gran medida por una mayor presencia de mujeres respecto de la segunda. No obstante, la diferencia entre varones y mujeres se mantiene aún al interior de comunidades temáticas en las que la problemática de género tiene relevancia. Mostrando su atenuación, pero también su carácter pertinaz, esta nota de investigación es una invitación a continuar desarrollando líneas de indagación basadas en datos que permitan cuestionar nuestras propias prácticas académicas.
En inglés
The aim of this paper is to analyze the impact of the researcher's gender on citation patterns and on the likelihood of focusing on gender issues among sociology and political science researchers of the Argentinean CONICET, the country’s most important scientific institution. The corpus consists of the three most cited papers of 253 scientists from both disciplines to which quantitative analysis techniques were applied. Our data verify the hypotheses based on research from the core countries and we found that female researchers are more likely to cite women and to study gender issues than male researchers, although the effect decreases for younger generations of researchers. In terms of disciplinary patterns, these gaps are narrower in sociology than in political science, because there are more female researchers in the former. Nevertheless, the gender gap persists even within thematic communities where gender issues are relevant. Showing its attenuation, but also its persistence, this research note calls for the continuation in following up lines of inquiry based on data that allow us to question our own academic practices.