La guerra ha sido un continuo en la historia de la humanidad, y como tal, ha ido experimentando cambios a la largo de la misma, definiéndose por diferentes características o elementos distintivos en las diversas etapas históricas.
El objetivo del presente escrito es problematizar las trasformaciones en el escenario más reciente de la guerra, para ello se utiliza como herramienta metodológica el concepto de Nuevas Guerras definido por Mary Kaldor (2001). A partir de dicha problematización la pregunta que motoriza el escrito plantea si las características de las Nuevas Guerras continúan siendo útiles para los escenarios conflictivos del siglo XXI. Para responder este interrogante se utilizan como estudio de caso los escenarios de conflicto desarrollados en Siria y Ucrania, para dar cuenta como ejemplos de las últimas guerras iniciadas a lo largo del globo y para permitir un abordaje inicial que pueda responder el interrogante.