Los sistemas penales en el mundo son imperfectos, existen diferentes factores que limitan la actuación estatal en este ámbito, uno de ellos es la “cuestión social”, tema principal de la agenda en materia de política criminal de cualquier gobierno. Por esta razón, los estados deben ordenar sus prioridades a la hora de abordar la temática penal. En ocasiones y ante la emergencia, los estados a través de sus tres poderes, deciden resolver las necesidades del área en un momento histórico y en un contexto determinado, tomando decisiones que, a corto plazo resuelvan -desde la óptica social y superficialmente- los temas de mayor sensibilidad para la población. Para ello, deciden a modo de ejemplo, distintas medidas o acciones positivas como: incrementos en los presupuestos en materia de seguridad, mayor presencia policial en las calles, intensificación de las tareas de vigilancia e inteligencia, creación de fuerzas de seguridad especializadas en distintas temáticas, modificación de leyes de fondo y de forma en materia penal -endurecimiento de penas-, entre otras.
En el afán de la labor diaria, los estados olvidan dos cuestiones fundamentales. En primer lugar, no se aborda de manera integral la prevención del delito -etapa anterior a la comisión de un delito-. Este tema, va mucho más allá de la sanción de una mera ley que agrave determinada pena, que se enraíza en abordar adecuadamente distintos temas sociales, económicos y culturales de manera estructural, interdisciplinariamente, con una perspectiva en derechos humanos y sostenida en el tiempo. En segundo lugar, nos encontramos con la falta de capacitación técnica de los auxiliares de la justicia -personal de las fuerzas de seguridad- quienes desconocen los principios rectores en materia de derechos humanos.
En este sentido en el presente trabajo se plantea a partir de casos concretos, la aplicación deficitaria del sistema penal, que, contrariando principios, derechos y garantías constitucionales y supralegales termina castigando y no re-educando, re-sociabilizando y re-insertando a las personas.