El cuento narra las aventuras de Quimey, una niña que posee una almohada mágica que cada noche la transforma en el animal que ha visto o leído durante el día. Gracias a esta almohada, Quimey vive experiencias únicas. Lleva su almohada a todas partes, es lo más importante para ella. Al enterarse de que su perrita está infestada de pulgas, Quimey se transforma en una de ellas. Cuando entiende lo que sentía su perrita, decide larva su almohada con un deseo especial: que desaparezcan las pulgas pero que la magia no desaparezca.