En esta ponencia se examina la posición editorial de La Nación sobre el comportamiento del sindicalismo frente a la privatización de las empresas estatales, durante el primer año y medio del gobierno de C. Menem, Se abordará la columna institucional reparando en sus estrategias discursivas y la utilización de los recursos retóricos empleados para referir al sindicalismo. Fiel exponente del liberalismo cuestionó las políticas del peronismo desde 1946, así como también la identificación de la Confederación General del Trabajo y la mayoría de sindicatos con ese ideario. Por ello, celebró su destitución en 1955 y contribuyó con el golpe de 1976, avalando las medidas punitorias ejecutadas por la dictadura que, inspiradas en la doctrina de la seguridad nacional, tuvieron como resultado la intervención a los gremios y sus obras sociales, la desaparición, el presidio y el exilio de dirigentes sindicales, así como la supresión de los derechos laborales, entre los cuales, se encontraba la negociación colectiva de las condiciones de trabajo con las patronales. Recuperada la democracia, continuaría fustigando al sindicalismo por considerar que desestabilizaba la democracia y el sistema republicano, postura que sostuvo durante los dos primeros años del gobierno de Menem cuando algunas organizaciones gremiales confrontaron con su política privatizadora.