Esta área de la medicina incluye el estudio, diagnóstico y tratamiento de las secuelas que afectan al aparato locomotor generadas por afecciones neurológicas. Su orientación es multidisciplinaria e involucra a diferentes profesionales sanitarios.
En la infancia, estas pueden remitir al período antenatal, producto de embriopatías o fetopatías diversas como mielomeningocele, esquizencefalia, o atrofia del cuerpo calloso entre otras.
Aun luego del nacimiento, el sistema nervioso central (SNC) puede verse afectado por secuelas de enfermedades de origen vascular, infeccioso, tumoral, traumático o degenerativo.
En el adulto, es común la continuidad terapéutica de enfermedades propias de la infancia o bien de afecciones adquiridas específicas.
Entre las principales entidades clínicas a considerar, se reconocen:
- Parálisis cerebral (PC)
- Mielomeningocele (MMC)
- Enfermedades neuromusculares: distrofia, atrofias musculares, miopatías.
- Trauma espinal
- Trauma craneal
- Lesión cerebral adquirida
- Neurofibromatosis
- Neuropatías o trastornos de los nervios periféricos
- Síndrome de Down
- Retrasos del desarrollo neuromotor
Estos pacientes tienen, en general, algún grado de discapacidad neuromotora. Un detallado examen clínico-neurológico, permite evaluar la necesidad de procedimientos ortopédicos o quirúrgicos específicos para mejorar su calidad de vida, funcionalidad y marcha.
Especialmente en los 20 últimos años, se ha producido un importante desarrollo de la neonatología y neurocirugía. Es por esta razón, que ha aumentado la incidencia y sobrevida de los pacientes con PC y MMC.